Con el calor muchas veces nuestro organismo sufre
descomposturas…
¿Qué hacer y como ayudar a nuestros hijos?
La diarrea aguda es un trastorno intestinal muy frecuente
entre los niños, especialmente en los menores de 5 años.
Entre sus causas más comunes se encuentran las infecciones, principalmente por
virus, los cambios en la dieta, el consumo de antibióticos, algunas
enfermedades intestinales o las intolerancias alimentarias.
Cerca del 80% de las diarreas agudas infantiles infecciosas están ocasionadas
por rotavirus y casi todos los niños sufrirán una infección de este tipo
antes de cumplir los 3-5
años de edad. La diarrea asociada al tratamiento con
antibióticos también es muy frecuente en niños pequeños.
Como consecuencia de una diarrea aguda, los niños tienen un riesgo elevado de deshidratación
que es importante tener en cuenta y valorar su gravedad adecuadamente con el
pediatra.
Beneficios de los probióticos en niños:
Para mejorar los síntomas de la diarrea, numerosos estudios evidencian la
eficacia de administrar determinados probióticos a los niños junto a la terapia
de rehidratación oral. La levadura Saccharomyces boulardii está indicada en el
tratamiento de la diarrea aguda tanto en adultos como en niños y se encuentra
recomendada en esta indicación en niños por la Sociedad Europea
de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica (ESPGHAN) y por la Organización Mundial
de Gastroenterología (WGO).
También ha mostrado su eficacia en el tratamiento y la prevención de la diarrea
infantil asociada al consumo de antibióticos, ya que reduce su incidencia y
restaura la microbiota afectada por estos medicamentos.
Controlar la dieta infantil...
Para restablecer el equilibrio de la flora intestinal se recomienda una dieta blanda,
que puede contener carnes y pescados blancos; patatas, zanahoria y arroz, pan
blanco; plátano, manzana o membrillo, entre otros alimentos permitidos.
Por otra parte, para favorecer la recuperación del proceso diarreico, se deben
utilizar técnicas culinarias específicas: cocciones largas y suaves (hervido,
horno o plancha) y servir la comida a temperatura ambiente. No se recomienda
eliminar la lactancia materna mientras dura el proceso diarreico.
Para finalizar, conviene tener en cuenta que, a pesar de la buena tolerabilidad
de los probióticos, es necesario contemplar la hipersensibilidad de cada niño a
cualquiera de los componentes del producto. Antes de su toma es recomendable
consultar con el pediatra.
Fuente: Mas Que Salud
Gracias amigos por la info!!!